jueves, septiembre 6

Sentarse

No tiene ningún sentido esperar de pie ni sentado a algo que no llega. Mirar al horizonte, creyendo que el momento se acerca, pero no pasa nada más que el viento. Sí, te mece, pero también da frío. Pero somos así. Yo soy así. A veces espero, consciente del masoquismo del hecho, pero no puedo evitar sentir un atisbo de optimismo al pensar que algo va a suceder. Entonces pasa el tiempo y sigo ahí, en el mismo lugar donde me quedé y pienso que por qué no avanzo yo sola, que sé perfectamente que puedo, y mientras mis pensamientos me rondan, sigo esperando. Me he esforzado tanto por continuar y empujarme a mí misma, que necesito un respiro para coger de nuevo fuerzas. Estoy cansada, así que voy a sentarme en el camino. ¿En cuál? No lo sé. No sé si voy a esperar algo o no. Terminaré el libro que estoy leyendo y me abstraeré de todo. Si algo llega, que me grite fuerte.


1 comentario:

John Keats dijo...

Te dejará sorda, de tan fuerte que lo hará.